jueves, 28 de julio de 2016

Hablemos sobre el Duelo



"Solo si el objeto ha sido amado como un todo, su pérdida puede ser sentida como total."


Melanie Klein, Psicoanalista 


El Duelo es el proceso de adaptación emocional que sigue a cualquier pérdida, esta puede ser la de un empleo, de un ser querido o de una relación sin importar el tipo de vínculo.  El duelo, además de tener una dimensión emocional, también tiene una dimensión física, cognitiva, filosófica y de la conducta que es vital en el comportamiento humano.  El duelo es la reacción de la psique ante la pérdida de una persona, animal, objeto o evento significativo. Se trata de una reacción principalmente emocional y conductual en forma de sufrimiento y aflicción, cuando el vínculo afectivo se rompe.

Este estado de duelo suele tener una duración entre 2 y 12 semanas, aunque puede persistir hasta los 6 meses cuando se trata de la pérdida de un ser querido muy allegado (padres, hijos o cónyuges).  No obstante, es importante destacar que estos periodos de tiempo no solo suceden cuando ocurren muertes físicas, también se experimentan en pérdidas como el empleo y el divorcio, ya que todo cierre de algún tipo de ciclo representa una muerte.   La intensidad y la duración de este proceso y de sus correlatos serán proporcionales a la dimensión y al significado de la pérdida.   Cabe señalar que no siempre se cumplen todas las etapas, ni necesariamente ocurren en el orden señalado.

Etapas Principales del Duelo:
Según el modelo descrito por el libro "On death and dying",  de la doctora Elisabeth Kübler Ross Psiquiatra estadounidense,  el  Duelo se manifiesta en cinco fases:
1. Fase de Negación: Negarse a sí mismo o al entorno que ha ocurrido la pérdida.  Es cuando la persona que enfrenta la perdida y expresa: “Esto no es real!” “Esto no me puede suceder a mí!”

2. Fase de Enfado, Indiferencia o Ira: Estado de descontento por no poder evitar la pérdida que sucede. Se buscan razones causales y culpabilidad.  El individuo busca un culpable o razones que causaron la pérdida.

3. Fase de Negociación: Negociar consigo mismo o con el entorno, entendiendo los pros y contras de la pérdida. Se intenta buscar una solución a la pérdida a pesar de conocerse la imposibilidad de que suceda.  El individuo reflexiona sobre la pérdida, aunque no quiere decir que no se sienta triste.

4. Fase de Dolor Emocional: Se experimenta tristeza por la pérdida. Pueden llegar a sucederse episodios depresivos que deberían ceder con el tiempo.   El individuo entra en una etapa de aislamiento y manifiesta su dolor a través del llanto.

5. Fase de Aceptación: Se asume que la pérdida es inevitable. Supone un cambio de visión de la situación sin la pérdida; siempre teniendo en cuenta que no es lo mismo aceptar que olvidar.   El individuo entra en la etapa de conocimiento de la situación y empieza una nueva etapa en su vida sin el objeto o persona perdida.

En esta última etapa se describen 4 tareas para completar el duelo:
1.  Aceptar la realidad de la pérdida.
2.  Experimentar la realidad de la pérdida.
3.  Sentir el dolor y todas sus emociones.
4.  Adaptarse a un ambiente en el cual falta el ser que murió, aprender a vivir en su ausencia, tomar decisiones en soledad, retirar la energía emocional y reinvertirla en nuevas situaciones o relaciones.   Esto también se aplica a otros tipos de pérdidas.

Tipología del Duelo:
El duelo no es una enfermedad, aunque puede llegar a serlo si su elaboración no es correcta. Se ha hablado, por ejemplo, de duelos complicados, crónicos, congelados, exagerados, reprimidos, enmascarados y psicóticos.   Entre los más compilados por los autores encontramos: 

1. Duelo bloqueado: Ocurre una negación a la realidad de la pérdida, donde hay una evitación del trabajo de duelo, y un bloqueo emocional-cognitivo que se manifiesta a través de conductas, percepciones ilusorias, síntomas somáticos o mentales o relacionales.

2. Duelo complicado: Síntomas o conductas de riesgo sostenidas en el tiempo y de intensidad riesgosas para la salud dentro de un contexto de pérdida.

3. Duelo patológico: La persistencia o intensidad de los síntomas ha llevado a alguno o varios de los miembros de la familia a detener la vida laboral, social, académica, orgánica.

Manifestaciones Externas del Duelo:
La manifestación externa del duelo es el Luto que es su expresión más o menos formalizada y cultural.   El duelo psicológico tiene en el luto su correlato más social.
El duelo también se puede exteriorizar con llantos, rabia, ataques violentos y un buen número de reacciones, todas ellas consideradas "normales" en esos momentos. Hay que tener en cuenta que los especialistas reconocen que para una buena elaboración y superación del duelo no es aconsejable querer huir de esas sensaciones de dolor, pues no se pueden enfrentar si no se sienten. Lo contrario es la negación de la pérdida, lo que llevaría a comportamientos desadaptativos.

Miosotis Grullón, Psicóloga
Editora del Blog


jueves, 21 de julio de 2016

Apoyo de Familiares en Pacientes Oncológicos


"Podrán llegar tempestades, pero cuando la familia está unida, no hay nada que la separe."

Anónimo 




En otra entrega anterior, hablamos del apoyo de la pareja al paciente diagnosticado y habíamos dicho que el cáncer no solo afecta a quien lo padece, también repercute en los familiares y amigos del paciente.  Son normales los sentimientos de preocupación o miedo ante la situación por la que atraviesa todo el circulo o sistema del afectado por la condición.    Ahora bien, los padres, hermanos, hijos y amigos pueden hacer mucho para ayudarle durante el proceso del tratamiento recuperación e incluso fase final de quien lo padece.  Existen varias formas o maneras de demostrar que apoyar al individuo afectado tales como que el familiar está presente o en situaciones prácticas (haciendo gestiones, cuidando a los niños o en la ayuda de la toma de decisiones).   Es importante que los familiares se informen acerca de la enfermedad, el tratamiento y los tipos de cuidado que conllevará la nueva situación que deberán enfrentar. 

A continuación unos cuantos tips que pueden mejorar la calidad de vida tanto del paciente como de sus allegados:

HIJOS
  • Hablar con sus padres.  El cáncer no debe ser un tabú.  Preguntar lo que no sepa o que quiera saber.
  • Tratar de sentirse útiles.  La ayuda es muy necesaria en casa.  Si lo hacen los hijos, pueden sentirse mucho mejor.
  • Ser paciente.  Es probable que los padres no puedan dedicar la misma atención que antes de la enfermedad.
  • Algo que tranquiliza bastante al padre o a la madre será ver que su enfermedad no ha alterado las rutinas ni las obligaciones.   Aunque cueste concentrarse, tratar de esforzarse en el estudio o continuar en lo posible con la actividad habitual para que no disminuya el rendimiento.
  • Decirle cuanto le ama.  Utilizar el contacto físico: caricias, besos, abrazos son importantes para que se sienta querido y acompañado.
  • Estar durante la estadía en el hospital.  En caso contrario, las llamadas o mensajes resultan muy alentadores.
  • Mantenerse al tanto de lo ocurre.  Contarle a su padre/madre de cómo va en los estudios.  Pedirle opinión.  Ayudarle a que se siga sintiendo útil pero a la vez no abrumarle de informaciones. 

FAMILIARES Y AMIGOS
  • Demostrar que está ahí y que puede contar con él/ella.
  • Procurar no importunar.  Llamar siempre antes de cualquier visita.  Ser comprensivo si el paciente no puede atenderle.
  • No descuidar el contacto físico.  Saludar y despedir con una caricia o un beso.
  • A veces son preferibles visitas y llamadas breves y frecuentes en lugar de largas y esporádicas. 
  • Durante las visitas, si hay más personas presentes, no olvidar hacerle partícipes de las conversaciones y sacar temas positivos y diferentes a la enfermedad que sean de su interés. 
  • Ayudar al paciente a mantener un papel activo en la relación: pedirle consejo, opinión, hacerle preguntas.
  • No mentirle.  Es mejor no decir nada a decir que tiene buen aspecto si no lo tiene.
  • Darle permiso a que se sienta triste, negativo o para estar en silencio si lo desea.  Si llora, no interrumpir su llanto.
  • No presionar para que luche contra la enfermedad si no se siente con fuerzas.
  • Procurar no agobiar con consejos médicos, opiniones personales sobre alimentación, otros casos de cáncer que conozca, medicación.
  • Ofrecerse para ayudar al paciente y la familiar con los recados o resolver cuestiones prácticas.

Miosotis Grullón, Psicóloga
Editora del Blog



jueves, 14 de julio de 2016

Risoterapia, recurso alternativo en terapias clásicas


“La risa es un verdadero desintoxicante moral capaz de curar o por lo menos atenuar la mayoría de nuestros males. Y además, no hay ningún peligro si se supera la dosis”.

Dr. Rubisntein

La Risoterapia, consiste en una estrategia o técnica psicoterapéutica tendiente a producir beneficios mentales y emocionales por medio de la risa. Es importante destacar que no es una terapia per se, ya que no cura por sí misma enfermedades, pero en ciertos casos logra sinergias positivas con las curas practicadas. Se trata en general que las sesiones de Risoterapia se practiquen en grupo aprovechando el contagio de persona a persona, ya que reír en grupo no es lo mismo que hacerlo solos. De esta forma, el efecto grupal estimula a los que normalmente no reirían.

A través de la vida, la sociedad nos enseña a reírnos de los demás en lugar de hacerlo con los demás. La risoterapia ayuda a desdramatizar las situaciones de la vida por lo que desarrolla el espíritu competitivo y optimista.  Las personas que realizan risoterapia aprenden a tener una mejor visión de ellos mismos, de su entorno y de sus posibilidades.

Lo básico que se debe practicar es reírse un minuto durante tres veces al día. Aunque eso parezca muy poco es lo esencial para que una persona tenga una mayor calidad de vida, siendo la risa la mejor medicina preventiva sin ninguna contraindicación.

¿En qué se basa la herramienta de Risoterapia?
La risa se utiliza con el fin de eliminar bloqueos emocionales, físicos, mentales, sexuales y sanar nuestra infancia, como proceso de crecimiento personal. Se crea un espacio para estar con uno mismo, vivir el aquí y ahora, estar en el presente (mindfulness). Esta tecnica contribuye a descubrir nuestros dones, abrirnos horizontes, vencer los miedos, llenarnos de luz, de fuerza, de ilusión, de sentido del humor, de gozo y aprender a vivir una vida positiva, intensa, sincera y total así como lo hacen los niños. Luego de una sesión de dos horas es inevitable sentirse pleno, amoroso, tierno, alegre, vital, energético y un sinfín de sentimientos positivos.

¿En qué nos puede ayudar la Risoterapia?
Se ha comprobado que la risa franca, la carcajada, aporta múltiples beneficios: rejuvenece, elimina el estrés, tensiones, ansiedad, depresión, colesterol, adelgaza, dolores, insomnio, problemas cardiovasculares, respiratorios, cualquier enfermedad. La Risoterapia aporta aceptación, comprensión, alegría, relajación.  Es decir, abre nuestros sentidos y ayuda a transformar  nuestras pautas mentales.


Recientes estudios sobre la capacidad de las carcajadas para combatir todo tipo de enfermedades indican que mientras reímos liberamos gran cantidad de endorfinas, responsables en gran parte de la sensación de bienestar.  Sigmund Freud atribuyó a las carcajadas el poder de liberar al organismo de energía negativa, algo que ha sido científicamente demostrado al descubrir que el córtex cerebral libera impulsos eléctricos negativos un segundo después de comenzar a reír. En los últimos 30 años se ha avanzado mucho en la aplicación de la risa como terapia.

En los años 70, Hunter Patch Adams, estadounidense, aplicó la alegría y el buen humor como apoyo en la recuperación y tratamiento de enfermedades, obteniendo beneficiosos resultados. A partir de entonces se comenzó a utilizar la técnica de la terapia de la risa en hospitales de EEUU, Suiza, Alemania y Francia.  En la actualidad, en muchos hospitales los pacientes pueden beneficiarse de la presencia de estos Doctores Sonrisas quienes son payasos terapeutas que con sus zapatones, globos, narizotas y mucho cariño hacen que sus dolencias sean un poco más llevaderas.

Beneficios fisiológicos de la risa
Moviliza la columna vertebral:  Ayuda a aliviar el estrés y los dolores de espalda. 
Fomenta la secreción hormonas de la felicidad:  Serotonina, dopamina, adrenalina y endorfinas que producen una sensación física de bienestar global. 
Cardiovasculares: Mejora la tensión arterial y los procesos asociados. 
Pulmonares: Al reír aumenta el doble de oxígeno, una hiperventilación natural que favorece a todos los procesos del organismo.


Risoterapia y la preparación a los participantes

Teoría: Se repasa todo lo referente a la risa en las diferentes culturas, así como las distintas clases de risa que se conocen (acogedora, maliciosa, nerviosa, hueca, histérica, profunda). Se estudia también la parte de la memoria en la que almacenamos los momentos en los que se ha reído.

Práctica de estiramientos: El movimiento desbloquea el cuerpo y éste se relaja. Por eso se hacen unos ejercicios de pulmones, espalda y estómago, para reír de la mejor forma y con la máxima facilidad.

Comunicación: Se hacen ejercicios de comunicación con el fin de desinhibirse y crear complicidad entre los asistentes a la terapia.

Técnicas: Se trata de practicar diversas técnicas con el fin de buscar la diversión y la vuelta a la infancia para lograr la mejor risa.  Es decir, la más saludable, esa que proporciona una carcajada intensa y pura.

Risoterapia y las sesiones

• Las sesiones se conforman entre 10 y 30 personas y son totalmente participativas. 

• En el inicio, se presenta el taller y se explica en qué consiste la Risoterapia (beneficios, tipos de risa, etc.)

• Luego se motiva todos los participantes a desinhibirse. Se intenta mejorar la comunicación entre los asistentes y cada uno se presenta al resto de participantes.  En esta etapa se colocan las narices de payaso.

• En lo siguiente se prepara a los participantes para los ejercicios.   Se relajan los músculos de distintas partes del cuerpo (zona abdominal, torácica y extremidades) para ayudar a conseguir una carcajada mejor, ya que esto desbloquea tensiones.

• En lo adelante se empiezan a emplear las técnicas que ayudan a buscar la risa infantil (la más saludable), y poder despertar al niño que llevamos dentro, utilizando juegos, bailes, música.

• Finalmente, se hace la puesta en escena de la experiencia.


En la actualidad,  existen sonidos para el celular y hay uno en especial que son las carcajadas de un bebe.  Se pone en práctica con pacientes que van a entrar al quirófano, en cuanto llegan les colocan el sonido de la risa y estos terminan riendo y bajando su tensión; como resultado entran más relajados a la cirugía y en el caso de los niños disminuye su miedo al encontrarse en un lugar desconocido y lejos de sus padres.

Miosotis Grullón, Psicóloga
Editora del Blog

viernes, 8 de julio de 2016

La Obesidad y el Inconsciente



“La gordura es un crear un bunker alrededor de un alma que teme que le le den en la herida que ya tiene.”
Alejandro Jodorowsky, Artista y Psicogenetista

La obesidad, como habíamos dicho en nuestra entrega anterior,  es una considerada una pandemia ya que las cifras son cada vez más alarmantes en todos los rangos de edad.   Hemos notado el aumento de personas que en su afán por bajar de peso acuden a expertos de diferentes ramas como médicos, endocrinos, spas, gurúes holísticos y hasta farsantes.  Sin embargo, los resultados son infructuosos ya que la condición como tal en la mayoría de los casos se origina en la psique, en el inconsciente.  Solo se intenta de tratar de romper hábitos que se automatizados como la ingesta de comidas (no de alimentos) y que resultan muy difíciles de cambiar y peor aun de erradicar.  Los traumas adquiridos durante la infancia no se reconocen y las conductas y hábitos persisten a lo largo de la vida.   

Cuando se habla de obesidad, nos referimos al simple aumento de peso desde la perspectiva física, sin embargo nos olvidamos del inconsciente.  Es decir, esos conceptos e ideaciones que residen en lo mas profundo del ser y del que el individuo no se da cuenta de que lo arrastra desde la primera infancia.  Existen simbolismos en los que el Psicoanálisis, corriente o escuela psicológica basada en el inconsciente y sus procesos hace su intervención y los mismos están cargados de representaciones:

Grasa en el abdomen:  Esta se acumula para defenderse de ser y de sentirse adulto.   El individuo adopta la forma de bebé barrigón ya que el árbol (familia) lo ataca cuando espigan (crecen).   También, ocurre la situación para simular un embarazo ya que el árbol (familia) acepta a la hembra como madre pero nunca como mujer.

Grasa en las caderas y muslos:  Lo hace con la finalidad de ocultar el talento creativo y la libertad de expresión artística.  El árbol (familia) asignó a otra persona este territorio o también puede ser que existe una prohibición total al desarrollo de la libido (deseo sexual) en beneficio de los otros egos como pueden ser el intelectual o material.  Esto quiere decir, que la familia bloquea los talentos y aptitudes del individuo para asignarlo a otro de sus miembros; o se da la situación de que de una forma sutil bloquean la libido para retener siempre a este ser al seno o núcleo familiar. 

Grasa en todo el cuerpo:  Muchas veces es el resultado de algún abuso de tipo sexual.   El individuo asocia la belleza con la agresión.  Esto quiere decir, en el caso de la mujer de que si que es bella será blanco de agresiones sexuales.  Si esta engorda nadie se fijará en ella ni la deseará sexualmente.  El resultado es o será la grasa en todo el cuerpo como un mecanismo de defensa para estar a salvo de cualquier situación de peligro.  Ejemplo:  "Si engordo, nadie me violará sexualmente."

Las personas que engordan lo hacen, de manera inconsciente (no se dan cuenta ni lo hacen a propósito), con la finalidad de protegerse de los demás o de algún tipo de trauma en la infancia.

En la obesidad no se acumula masa ósea, ni muscular ni se agranda ningún órgano, ni se llenan cavidades de aires.  Lo que se acumula bajo la capa de la piel es cantidad de grasa o energía estancada que no se va a usar y se retiene líquido (emociones tóxicas) que el organismo no puede eliminar.

Las células del cuerpo de un obeso se deben a una necesidad de acumular grasa de cualquier forma a como dé lugar y no soltarla o quemarla.    Esta grasa pasa a ser una fortaleza o soporte que el soma (cuerpo) obedece a las ordenes del Patrón (el inconsciente) y sitúa la grasa de forma estratégica con diferentes intenciones.

Según Naska Groppaglio, experta en Psicología del Movimiento,  la obesidad así como la delgadez y las jorobas se utilizan para integrarse en el clan familiar.   Cuando no hay suficiente espacio en familias con muchos hijos, cuando se nace de forma no deseada o del sexo no esperado, el cerebro más primitivo encuentre estrategias de supervivencia que responden a estos patrones ya mencionados.

Existen individuos obesos que establecen su prioridad en el ahorro, y se convierten en acumuladores materiales.   Esto se debe a que la obesidad puede ser un síntoma de esa disposición del miedo a que le falte cualquier bien material.  Como resultado, esta acumulación se convierte en un seguro contra todo riesgo donde la grasa es su poliza de vida.

También está el individuo obeso hijo de una madre dominante, castrante o posesiva que ejerció control absoluto sobre sus pensamientos, sentimientos y creatividad.  La obesidad representa una oposición inconsciente a esa autoridad materna que abusó de esta persona.   Cuando se sufre de abuso esto es algo que se repite y se convierte en un patrón generacional.  Por lo tanto, es necesario descubrir, reconocer para luego eliminar el símbolo del abuso y romper con esta fijación.

Cabe destacar que el estómago contiene una red neuronal con cien millones de neuronas en el conducto intestinal por que lo que este órgano actúa como un segundo cerebro.   Se conoce como “sentimiento intestinal” al nudo que sentimos que se nos forma en el estómago.   Como resultado se satisface con alimento cualquier sensación con exceso de alimento cuando sentimos amor, ira o ternura.  Por lo tanto es importante reconocer estos síntomas que a simple vista se aprecian en el cuerpo:

Sobrepeso:  Relacionado con el hecho de acumular cosas, ideas, emociones, querer protegerse, sentirse limitado, vivir una vida interior.

Celulitis:   El miedo al apego y a la tendencia de guardar emociones del pasado.

Retención de líquidos:  Miedo a perder algo; lo que resulta en acumulación de cosas.

ObesidadDeseo de protección generalizada e hipersensibilidad (magnificacion de las emociones).

En fin, la obesidad es un mensaje que el cuerpo nos manifiesta para sanar lo que está en nuestro inconsciente.  Como parte final es recomendable como introspección estos cuestionamientos:

  • ¿Qué oculto detrás de la grasa?
  • ¿Qué en realidad acumulo y para qué?
  • ¿Por qué no dejo fluir la energía y las emociones?
  • ¿He tenido suficiente espacio para crecer entre mis hermanos?
  • ¿Alimento mi falta de amor con exceso de comida?

Miosotis Grullón, Psicóloga
Editora del Blog